Celia es natural de San Francisco y tiene tres hijos: dos niños y una niña. Fue enviada a prisión a los 19 años, donde se enfrentaba a una cadena perpetua. Durante 3 años luchó por su libertad y finalmente fue puesta en libertad. Celia pudo salir de la cárcel y a partir de ahí cambió de vida. Ella ha estado trabajando en el campo de la gestión de casos durante 23 años, devolviendo y ayudando a aquellos que necesitan apoyo en nuestra comunidad.